TERCERA EDAD CON ESPERANZA por Alina


De pronto me di cuenta que me encontraba en lo que denominan “la tercera edad” y sentí temor y angustia, mi mente funcionaba bien pero mi cuerpo no respondía como antes, todo aumentó con la muerte de mi madre, se agregó una profunda tristeza y empezaron muchos problemas físicos que ameritaron evaluación de distintas especialidades médicas, recibí medicinas que no lograron una mejoría como para recuperar  la normalidad en mi vida.  La preocupación de mi hija me condujo al Consultorio de la Dra. Elena Valencia que practica la especialidad de Medicina Complementaría, nueva para mí en ese momento.   La impresión inicial con la doctora fue impactante, su forma de abordar mi situación sin someterme a preguntas exhaustivas me produjo una sensación de bienestar que fue aumentando con las distintas técnicas que me aplicó, llegando a lograr en corto tiempo la eliminación de mis miedos excesivos, seguí con mi vida sin mayores contratiempos.   Al cabo de algunos años, me sometí, como de costumbre, a un chequeo médico de control y se encontró un problema hematológico por el que fui sometida a exámenes para encontrar su causa, dentro de ellos se me indicó una punción medular.  Sentí temor y antes de realizarme la prueba consulté con la Dra. Valencia, recibí tratamiento de su especialidad que mejoraron mi actitud frente a lo que estaba viviendo, acepté mi problema médico sin angustia y con mucha esperanza en mi sanación, cuando volví a ser evaluada los resultados hematológicos habían regresado a valores normales, los que se mantienen hasta la actualidad.

Hace dos años me fracturé la clavícula izquierda por un accidente de tránsito. A los 81 años las fracturas demoran en sanar por lo menos tres meses, según me indicó el traumatólogo y debía cuidarme para que la clavícula se suelde.  Al tiempo que seguía las indicaciones de traumatología, consulté nuevamente con la Dra. Elena y me sometí a diversas técnicas que me indicó.  A las tres semanas del accidente me realicé una radiografía de control y el resultado sorprendió al traumatólogo, mi clavícula estaba soldada y lista para la rehabilitación.

ALINA

Comentarios

Entradas más populares de este blog

ESCUCHANDO NUESTRA VOZ INTERIOR. 8vo. EJERCICIO

LA PIEL Y LAS EMOCIONES

ESCUCHANDO NUESTRA VOZ INTERIOR. 7mo. EJERCICIO